La condición del cuerpo en la sociedad contemporánea: del bienestar físico al culto al cuerpo como reafirmación de un estilo de vida saludable.

Enfoque

Las dinámicas establecidas por las políticas públicas del sector salud tienen como objetivo empoderar a los ciudadanos desde una visión preventiva para el alcance de un estilo de vida saludable. Para lo cual, es importante dimensionar las condiciones geográficas y sociales. En la actualidad, existe una preocupación desmedida dedicada, al cuidado corpóreo, el cual corresponde a todas aquellas acciones ejecutadas por el sujeto, con el propósito de mantener o alcanzar el bienestar físico, en cuanto a la salud y la apariencia.

El establecimiento de un estilo de vida saludable impone, además de la sistematización de cuidados cotidianos de alimentación, ejercicio y el manejo del estrés, la valoración de la imagen como sentido de pertenencia del cuerpo vivido, lo cual fomenta el acompañamiento de una forma de vida en la que los deseos y placeres van dirigidos a que el sujeto se sienta bien con el propio cuerpo. El alcance de esta condición asume una serie de pedagogías corporales que tecnifican las prácticas sociales en concordancia con el contexto del individuo.

En el culto al cuerpo, se impone la gran importancia que se concede a la apariencia física. Esta dinámica que se instala como una continua obsesión por la estética y lo socialmente establecido como belleza, de acuerdo a la población en cuestión. Esta tendencia se caracteriza por una búsqueda incesante de una imagen que se consigue mediante el ejercicio extenuante, dietas y otros medios.

La utilización de regímenes dietéticos con un predominio de consumo de algunos de los grupos de alimentos con porciones no equilibradas contribuye a la aparición de diversas patologías, especialmente a nivel digestivo y endocrino-metabólico. De igual modo, el uso de suplementos en diversas presentaciones, que en ocasiones sustituyen una de las ingestas, entra en contradicción con lo recomendado por los profesionales en cuanto a que una ingesta adecuada en calidad y cantidad de los diferentes grupos de alimentos favorece un apropiado estado de salud en todos los sujetos, siendo el desequilibrio del mismo una de las principales causas de diversas patologías crónicas degenerativas.

El bombardeo constante de imágenes y la presión social para ajustarse a un determinado ideal de belleza han provocado un incremento en la proliferación de sujetos de ambos sexos que dedican tiempo y recursos desmedidos al cuidado del cuerpo, lo cual, en algunos casos, ha favorecido la aparición de algunos trastornos conductuales relacionados con la idealización del cuerpo. No se trata solo de estética, sino también de salud, bienestar y superación personal. A menudo se recurre a ella como forma de reforzar la confianza en uno mismo y la estima, así como la posición social. Ahora bien, el culto al cuerpo no es solo una búsqueda personal, sino también un fenómeno sociocultural que refleja los valores y las normas predominantes en las distintas sociedades.